jueves, 30 de diciembre de 2010

Hoyo aquí


Una de las cuetiones interesantes de la contracultura homosexual es que parece ser una especie de anzuelo o reclamo, algo así como: “gay aquí” o “hoyo aquí”, algo así como un cartel identificativo de un gay dispuesto a que un macho se la clave o, dicho más fino, un distintivo de los gays pasivos. La pregunta que reiteradamente me hago, también en este blog, es ¿cuál es el atractivo de esa contracultura?, ¿dónde está el “sex appeal” en un disfraz de gay? Y, sobretodo, ¿por qué esa contracultura tiene que ser tan poco masculina?

Por suerte, en los últimos años hemos estado viendo con más frecuencia la imagen de hombres despampanantes, musculosos y varoniles, pero que, sinceramente, son pura ficción. Sí, los modelos que se nos muestran son esa clase de hombre que todos querríamos tener en la cama, pero, a la hora de la verdad, el ambiente gay es intrínsecamente contracultural y, si uno busca algo de masculinidad tiene que conformarse con los macarras. A menudo parece difícil encontrar gente común, que podría ser heterosexual o no, que no tiene una moda o tendencia clara o sigue su propio estilo, gente con dotes brillantes, pero carente de arrogancia. No. La tipología homosexual no debe ser así: es lo que ordena la tiránica cultura heterosexual, ésa de la que la contracultura gay es un vago reflejo.

De modo que señores, o debería decir señoritas, si les gusta disfrutar del sexo anal, pónganse un cartel que diga: “hoyo aquí”. Así lo han querido los heteros.

martes, 28 de diciembre de 2010

Randy Harrison

Randy Harrison interpreta a Justin Taylor en la versión americana de Queer as Folk. A lo largo de las cinco temporadas, la serie nos depara momentos muy sexies y muy poco censurados de Justin y Brian, el protagonista de la serie. Os dejo algunas imágenes de Randy:









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Queer as Folk en la Wikipedia

sábado, 25 de diciembre de 2010

¡Feliz Gayvidad!

Nada mejor que regalarse la vista con imágenes de tíos buenos por Navidad así que esta semana he decidido aportar doble ración. Hoy os deseo una Feliz Navidad con Chord Overstreet. Sí, el rubio cachondo de Glee tiene nombre. Chord Overstreet interpreta el papel de Sam Evans. Cuando empecé a ver la segunda temporada no pude dar crédito a mis ojos. ¡Impresionante! Los productores han tenido todo un detalle con este fichaje estrella.

Abs, wow!



La primera vez que se nos presenta al personaje es en la ducha: gran entrada.

Sam Evans cumple, digamos, con el perfil de metrosexual. Interesado por las tías, Sam se preocupa por su aspecto y se cuída tanto en el gimnasio como con la dieta. En algún capítulo de la segunda temporada, le revelará a Finn algunos de sus secretos para mantenerse tan sexy. No sé si es lo que de verdad hace el actor para mantenerse así, pero, en cualquier caso, todo mi agradecimiento. Verle a él es un regalo.

Chord Overstreet en la Wikipedia
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Más fotos sexies de Chord Overstreet

jueves, 23 de diciembre de 2010

Queer as Folk (USA)


Queer as Folk es una producción conjunta de Showtime y Temple Street Productions basada en la serie británica del mismo nombre y emitida entre los años 2000 y 2005. La serie aborda la vida de un grupo de homosexuales afincados en Pittsburgh, capital de Pensilvania, estado tradicional donde los haya, con los Amis entre sus conciudadanos.

La serie, de contenido claramente homosexual, es una referencia obligada en la cultura gay contemporánea y refleja los distintos problemas y perspectivas del mundo gay. Brian Kiney, un narcisista arrogante, es la estrella de la serie y entorno a él giran con más o menos luz otros personajes como Justin, Michael, Emmett, Ted y una pareja de lesbianas. Si aún no habéis tenido el placer de verla, os aconsejo que os hagáis con todas las temporadas y la disfrutéis porque, de ahora en adelante, publicaré sobre aspectos puntuales de la misma.

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martes, 21 de diciembre de 2010

Mitch Hewer

Mitch Hewer es conocido por interpretar el presonaje de Maxxie en la serie británica Skins. Sus cualidades son muchas, es buen bailarín, buen amigo (si es que rechazar una mamada de Tony es amistad) y, además, está muy bueno. Así que os dejo con unas fotos suyas:








Maxxie en la wikipedia
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Más fotos sexies de Mitch Hewer

jueves, 16 de diciembre de 2010

¿Por qué tu religión te odia?


Si eres gay y te has criado en un entorno tradicional y religioso es probable que hayas tenido aún más problemas para sentirte cómodo contigo mismo en una sociedad ya de por sí bastante heterosexualizante. Si algo me está enseñando mi relación con un musulmán, es que el origen religioso no es tan determinante en la autoaceptación. Para mí como católico fue más difícil aceptarme que para mi novio como musulmán (aclaro que yo ya no soy católico). Sin embargo, cuando hablamos de la aceptación por el entorno, entonces las cosas cambian: no es nada fácil ser musulmán y gay. Por un lado o por otro la religión puede acabar siendo un problema o, mejor dicho, muy probablemente será un problema.

Pero ¿a qué puede deberse esto? Lo primero que debemos pensar es que dios no fue creado para explicar el mundo o lo desconocido. Dios fue creado esencialmente para crear todo un sistema social de comportamiento. El objetivo de tener ese dios no es otro que el logro del dominio por la casta sacerdotal y, por una cosa o por otra, a esa casta nunca le ha interesado la pluralidad en la sociedad y, menos aún, la existencia de minorías como las sexuales. Es una tendencia natural de las religiones reprimir a las minorías salvo, claro está, cuando ellas mismas son esa minoría: entonces se vuelven tolerantes y desafiantes a la vez y aguardan hasta poder tomar el control. Esa manía es consustancial a la religión: como todo sistema de valores busca la uniformidad y ser gay no es nada uniforme.


Pero vayamos un poco más al fondo del asunto. En lo que atañe a la religión cristiana, la razón del odio y la represión de la homosexualidad es clara. El cristianismo está construido en sí como un sistema represor de todo tipo de placeres y, especialmente, de la sexualidad. El cristiano está en el mundo de paso porque este mundo no es el verdadero. El mundo verdadero es el que está después de la muerte y ése es el que el cristiano debe ganarse a través de la virtud, que purifica el alma. La culpa de todo esto la tiene Platón, ya que todo este sistema es básicamente suyo o ni eso, más bien lo copió de los pitagóricos, pero a nosotros nos ha llegado por él a través del cristianismo. El hecho de que el aquí y el ahora no tengan ningún sentido más que en un mundo imaginario creado por los sacerdotes es un absurdo, pero es sobre todo ese absurdo sobre el que se ha creado la represión. Es Platón el primero en destruir el amor convirtiéndolo en algo asexuado. Y, para más señas, véase “El Banquete”. El amor sólo tiene sentido en ese sistema como una mera contemplación de la belleza que nos recuerda la Belleza en Sí, esto es, a dios. El amor en el platonismo y, por ende, en el cristianismo, no es más que ¡una contemplación de dios!


No me preguntéis cómo funciona eso en la cama porque no lo sé. Lo que quieren ellos, en el fondo, es que no funcione y menos en la cama. Por eso, en el cristianismo el sexo sólo tiene sentido como concepción, en tanto que acto creador, don divino que se nos ha dado y, ya de paso, en tanto que mandato directo del antiguo Yavé (recordáis el "creced y multiplicaos"). Todo este fraude intelectual es el responsable de que los cristianos heteros sólo puedan follar para procrear (de ahí la prohibición de los anticonceptivos) y de que los cristianos gays no puedan ni siquiera follar. La homosexualidad en el esquema platónico/cristiano directamente sobra. ¿Qué sentido tiene el amor si no puede “engendrar en la belleza”, esto es, si no puede ser platónico? La única posible relación homosexual en el esquema platónico es el discipulado pulcro y casto. ¿A alguien le extraña ahora que la iglesia católica haya acabado teniendo toda una casta asexuada sacerdotal exclusivamente del género masculino? El sacerdocio es el producto monstruoso de “El Banquete” de Platón, esa obra que sólo debió haberse escrito para saber lo que no es el amor.


De modo que como mi maestro Nietzsche siempre nos recuerda en sus obras, el cristianismo como el ideal ascético no es más que odio contra la vida: la construcción de todo un sistema sobrenatural para la creación de un esquema de antivalores en el que lo bueno pasa a ser lo malvado. Traído a este tema, la creación de una moral que prohíbe el sexo. El genio al que le debemos la expansión de la enfermedad platónica se llama Pablo de Tarso (algunos tienen el descaro de llamarlo “santo”). Todas sus enseñanzas son, esencialmente, un plagio de mi “amigo” Platón aunque con algunos cambios terminológicos. Así, la palabra “amor” de “El Banquete” y el dios Eros acabaron siendo para los cristianos la “caritas” (¡qué decadencia!) hasta que recientemente han vuelto a emplear la palabra amor, recordándonos una vez más cómo han manipulado esa palabra hasta quitarle prácticamente toda significación sexual, nada más lejos de lo que pasaba en la Grecia Clásica, donde Eros era la antesala de Afrodita, del polvo, hablando rápido.

martes, 14 de diciembre de 2010

Nicholas Hoult

Esta semana toca uno de los actores más sexies del momento, esta vez británico, y que es muy conocido por la serie Skins, de cuyo tratamiento de la homosexualidad hablaré en entradas posteriores. Hoult también ha interpretado papeles en el cine, destacando A sigle man, película sobre la que también publicaré y en la que se ve involucrado en la vida de un profesor en la América de la crisis de los misiles de Cuba. ¡Disfrutad las imágenes!

Abdomen perfecto

Unos brazos fuertes que desprenden virilidad

Probablemente su rasgo más sensual son sus labios


Curioso, pero sexy atuendo deportivo

Mirada inocente

Más imágenes sexies de Nicholas Hoult
Nicholas Hoult en la Wikipedia

jueves, 9 de diciembre de 2010

El “sex appeal” del amaneramiento

Siempre me he preguntado qué atractivo tienen los hombres afeminados. A mí siempre me han gustado los “heteros” y no porque le tenga manía a los gays sino porque siempre me han atraído (y mucho) los hombres “straight acting” o, en definitiva, los hombres viriles, masculinos. Todos aquellos rasgos que han servido para reforzar esa imagen de virilidad me han parecido siempre muy “sexies”: desde la propia indumentaria que los expertos en moda llamarían, como poco, desfasada, clásica o demasiado hetero hasta los ademanes y las actitudes que denotan fortaleza, valentía, independencia, tenacidad... En general todo lo que ser hombre significa en esta sociedad sexista.

Los hombres afeminados, sin embargo, tendrán su mercado. Quiero decir, habrá gays que se sentirán atraídos por ellos de algún modo porque, de lo contrario, dudo que existiera el afeminamiento y toda su contracultura. Vamos, que la moda está muy bien y ser una diva será fantástico, pero, si así no follaran, seguro que mandaban a tomar viento las últimas tendencias y le ponían un resorte a la muñeca para que no cimbreara tanto. En definitiva, a lo que voy, ¿qué tipo de hombre se siente atraído por los gays afeminados? ¿aquellos más cercanos a la bisexualidad que buscan un hombre más femenino o, simplemente, aquellos activos que buscan echar un polvo fácil sin preocuparse de que les intenten dar por el culo? ¿O ambas cosas o ninguna?

martes, 7 de diciembre de 2010

Zac Efron

Esta semana os deleito con imágenes de Zac Efron, otro joven actor norteamericano, principalmente conocido por papeles en musicales y que, además, tiene adosada una absurda campaña de foros y blogeros discutiendo sobre su posible homosexualidad. ¿Quién necesita esa polémica para fantasear? y ¿qué necesidad tiene Zac Efron de decir si es gay o no tan sólo porque muchos indiscretos se lo estén preguntando? Pasando por alto toda esta polémica, os dejo con algo mucho más interesante, con sus fotos sexies, que siguen siendo igual de sexies, incluso más si es hetero (ya sabéis, por eso de "no podemos tenerlo"). ¡Que las disfrutéis!

Cualquier foto de tipo acuático siempre cuenta con un plus.


Mirada, mano en el pecho... sólo le falta pedirnos que nos recostemos con él.


¡Abdominales!

domingo, 5 de diciembre de 2010

Prayers for Bobby (2009)

Prayers for Bobby es una película norteamericana estrenada en TV el año pasado y dirigida por Russel Mulcahy. Aborda la salida del armario de un adolescente en los EEUU de los años setenta y en el seno de una familia presbiteriana muy tradicional. Basada en unos hechos reales muy duros, la película no le ahorrará al espectador unas lágrimas. Nos presenta, esencialmente, la homofobia de origen religioso, siempre tan nociva, y que puede degenerar en ocasiones en acontecimientos muy trágicos que vuelven a sus protagonistas conscientes del odio en el que han estado inmersos y que no les ha dejado vivir. Desde el sufrimiento de una experiencia que no debería vivir nadie, la madre de Bobby se recompone, se transforma y, finalmente, se redime convirtiéndose en una activista por los derechos de gays y lesbianas.

Prayers for Bobby en la Wikipedia

jueves, 2 de diciembre de 2010

Mi tierra

Andalucía, ¡visítala como turista, pero no te quedes a vivir!

Mi tierra es Andalucía, un país situado en el sur de España, que se supone que cuenta con maravillosos paisajes y una gente “única”. Pues bien. Andalucía no es un lugar para vivir, especialmente si eres gay/lesbiana y no hablemos ya de los transexuales. Andalucía es una tierra hostil al talento, a la genialidad y, también, a cualquier estilo de vida que se desvíe de la vulgar autocomplacencia resignada cristiana, de la vida como una cuesta arriba de la que hay que librarse ganando la lotería, dejando de trabajar y dándose al fino en la taberna rajando de todo aquél que hace algo con su vida. Es una tierra, como decirlo, embuída de un platonismo católico que lo envenena todo y que oprime la garganta de la gente sana como sólo lo haría una bota militar. Las calles sinuosas y las casas blancas le recuerdan a uno la desgraciada ocupación musulmana. Las numerosas iglesias católicas y ermitas que completan el panorama convierten el paisaje urbano en un erial que emite un hedor a misticismo que convierte el aire en irrespirable. Sentirse rodeado por la religiosidad popular de un pueblo inculto y supersticioso como el andaluz no es difícil, especialmente cuando los ensayos de las bandas cofrades te recuerdan incluso en Navidad esa monstruosa redención que sólo ha servido para condenar a los cristianos a la muerte en vida. Pero la resignación. ¡Esa resignación! Qué vicio tan perverso, que mirada tan vengativa contra la vida (Gracias, Nietzsche, por dejarmelo tan claro), qué coartada intelectual de la inacción, del dejarse hacer y llevar. Sólo un tsunami puede equiparársele. Y los gays, ¡ah, los gays! Los pueblos latinos, envenenados por su cultura falsamente rebosante de vida son especialmente hostiles a la homosexualidad. Andalucía es, en eso, más papista que el papa. Sólo en Málaga viven más de 600.000 personas lo que hace un total de 60.000 gays y lesbianas aproximadamente. ¿Por qué las parejas gays y lesbianas son una rara avis en el centro de Málaga a diferencia de ciudades como Madrid? ¿Por qué aún no ha llegado esa normalidad a Andalucía? Eso por no hablar del estilo. ¿Es que en ese país tienen estropeado el sentido del gusto? La vulgaridad que ocupa tanto espacio vacío en sus cavidades craneales parece supurar impregnando todo el ambiente, los edificios, las calles, de un grisáceo deslucido y feo que toma forma en edificios incompatibles y de mal gusto: una arquitectura fea y retorcida, toda una proyección freudiana hecha realidad. No me interpretéis mal, lo mejor que ha hecho Andalucía por mí es estar en España, que a su vez está en la UE y permitirme así salir de ese erial del talento. Después de todo Andalucía no está tan mal situada y, probablemente, haya sitios que tengan aún más potenciados todos estos defectos. Pero ¡ay! Yo los he padecido allí. Nada más liberador que pasar despeñaperros. Sí, de Gibraltar hacia el sur mejor ni hablar.

martes, 30 de noviembre de 2010

Chace Crawford

Chace Crawford es un actor norteamericano muy conocido por la serie Gossip Girl. Yo no lo conocía hasta que por causalidad me topé con una foto suya. De Gossip Girl no he visto ni el capítulo piloto. En cualquier caso, Chace Crawford tiene mucho morbo y es el tío bueno invitado de la semana.

¡Oh, my God!




Siempre hay un fan enamorado/a que hace un vídeo recopilando escenas e imagenes sexies. Aquí os dejo con uno de ellos.

Fotos sexies de Chace Crawford
Chace Crawford en la Wikipedia

domingo, 28 de noviembre de 2010

Yossi and Jagger (2002)


Yossi and Jagger es una película israelí de temática gay estrenada con gran polémica en el año 2002. ¿A qué se debía tanta polémica? El film aborda una historia de amor entre dos soldados israelíes en plena campaña en la frontera del Líbano. Por muchas razones puede considerarse "provocativa":

- Enfrenta a los conservadores ante la incómoda realidad de que la homosexualidad también está en el ejército y puede ir vinculada a elementos viriles.

- Amenaza la retrógrada visión hebrea de que su ejército es una especie de brazo de Yavé, siempre tan atento con su "pueblo elegido". Claro está, el brazo de Yavé no puede tener "células" homosexuales. (Nótese que el tono burlesco es alusivo al elemento religioso y no al étnico, que considero irrelevante).

- Después de todo, no es la historia de un desahogo espontáneo de un par de heteros que necesitan un polvo en plena campaña militar. Aquí hay una historia de amor y, para más inri, en el ejército israelí también hay mujeres con las que "desahogarse". Por no decir que Jagger rechaza las atenciones de una camarada de filas. La historia de amor entre Yossi y Jagger cobra así un nuevo significado muy romántico y, también, muy inconveniente para las hordas conservadoras.

- Está basada en una historia real.

Todos estos motivos son más que suficientes para ver la película. Se trata de una película gay nada convencional que aborda, además del tabú de la homosexualidad en el ejército, temas más velados como el absurdo de la guerra en un mundo en el que los seres humanos ya tenemos bastantes preocupaciones como para matarnos unos a otros. Quizás, se vea en el fondo de esta película una pequeño güiño al eslogan hippie ¡Haz el amor y no la guerra!, tan odiado por tantos neocon.

jueves, 25 de noviembre de 2010

Mi estilo

El otro día cuestionaron mi estilo demasiado “straight-acting” en un par de sitios de ambiente gay. Y mi pregunta es ¿es que por el hecho de ser homosexual tengo que ser o una reinona arrogante o un macarra tatuado y reventado en el gimnasio? ¿Es que no hay un lugar para la gente como yo en esos locales? Yo creo que sí lo hay, pero probablemente no di con las personas adecuadas. En cualquier caso, por ser gay no hay que ir maquillado ni tiene que parecer que te ha secuestrado el hermano gemelo maligno de Llongeras. Ser gay implica que eres un hombre al que le gustan otros hombres.

Una cuestión distinta es que algunos añadan elementos contraculturales que, desde mi punto de vista, son el empleo de la estética femenina y de los roles femeninos con la intención de subvertir el orden heterosexual. Pero yo no tengo ninguna necesidad de subvertir el orden heterosexual. Sólo quiero una sociedad que me respete por quien soy y que no me exija ponerme una falda o pintalabios para reclamar mi visibilidad o mis derechos. Se equivocan aquellos que piensan que voy a actuar como una mujer o a ponerme un peinado que me identifique igual que los triángulos rosas nazis porque, precisamente, esa pesadilla de los heteros, las reinonas y toda la contracultura homosexual afeminada es el fruto del heterosexismo. Y no hablo de la transexualidad, a la que respeto profundamente, hablo de hombres que saben perfectamente que lo son y lo quieren así, es decir, de hombres sin ningún tipo de disforia de género, como sí le pasa a los transexuales, y que, por contra, “por diversión” o “para liberarse” se afeminan y se hacen “diferentes”. Es una decisión legítima, la respeto y no seré yo quien les cuestione el estilo, pero es el producto del heterosexismo que no soporta ver a un hombre que podría ser perfectamente heterosexual enrollándose con otro hombre o que no aguanta ver a un hombre “normal” con otro hombre “normal”.

Ese heterosexismo proyecta en los gays lo mismo que ven en las mujeres: debilidad, dependencia, sumisión... Quieren para los gays, los mismos yugos que han sujetado a la mujer desde siempre y muchos gays se suman al carro de lo eterno femenino, de lo eterno oprimido. Pues les diré. Mi estilo es mío. Y ni la mujer tiene que masculinizarse para lograr la igualdad ni nosotros tenemos que afeminarnos para reivindicar lo nuestro. Y, del mismo modo que ellos hacen activismo con su estética y su pose contracultural tan odiada por los heterosexistas al tiempo que fruto mismo del heterosexismo, yo pienso hacer activismo a mi manera. Y, sí, aquellos que me conocen desde hace muchos años y que tal vez esperen un cambio de carácter tras mi salida del armario serán los primeros que aprendan esta lección: los gays somos tan hombres como los heteros y algunos, yo creo que muchos, estamos orgullosos de nuestra hombría.

martes, 23 de noviembre de 2010

Íker Casillas

Íker Casillas, portero titular del Real Madrid y de la Selección Española de fútbol, no necesita demasiada presentación. Es un gran futbolista que, además, reune la codiciada condición de ser guapo y estar muy bueno. Aquí os dejo unas cuantas imágenes.


¡Viva el metrosexualismo que nos trae estas portadas!


Más imágenes sexies de Íker Casillas
Íker Casillas en la Wikipedia

domingo, 21 de noviembre de 2010

Sommersturm (2004)

En primer plano, Achim. En segundo, Tobi.

Sommersturm o Tormenta de verano es una película alemana estrenada en 2004 que aborda la homosexualidad desde un punto de vista poco estereotípico y, por ello, sumamente interesante. El protagonista, Tobi, un joven remero de 16 años, entrena con su mejor amigo en un equipo de remo del que forma parte y que participará en una regata nacional. El comienzo de la película, preludio de la gran competición, nos sitúa en la amistad de Tobi con Achim y nos deja claro los sentimientos, no compartidos, del primero por el segundo. Así, Tobi, embarcado en una relación sin futuro con otra chica de su instituto, irá viendo, desconcertado, como sus sentimientos por Achim afloran. La historia de Tobi es la de un chico corriente al que le gustan otros chicos de su edad y su entorno y que se enamora de su mejor amigo. Podía haber sido, en tintes generales, mi historia personal y es, probablemente, la de muchos gays. ¿Quién no se ha enamorado de su amigo hetero en la adolescencia y se ha acordado del puto Platón y su amor platónico? La historia de Tobi es una salida del armario muy poco habitual en el cine y, por desgracia, seguramente también en la realidad, que no deja de poner de relieve un hecho que está ahí: el mundo del deporte aún sigue siendo muy hostil a los gays y muchos gays siguen huyendo del deporte, refugiándose en los estereotipos y dándole la razón al tradicional discurso del lenguaje que vincula homosexualidad a femineidad y, como tal, a debilidad y a dependencia. Detalles eróticos: La película tiene dos escenas muy sugerentes, una al comienzo, en la que Tobi y Achim se masturban en un vestuario, y otra en la que Tobi tiene una relación con un remero del equipo gay. Por último, hay que decir en defensa de Tobi que Achim es muy guapo así que normal que se enamore de él. ¿Quién no lo habría hecho?

Tormenta de verano en la Wikipedia.

Trailer en inglés:

jueves, 18 de noviembre de 2010

Soy un cobarde

Supongo que es fácil ser gay si nunca han sospechado nada de ti y, por consiguiente, si tampoco has tenido que enfrentarte de cara a las amargas consecuencias de la exclusión que sufren muchos gays, por ejemplo, en los institutos. Lo cierto es que no puede decirse que yo haya sido precisamente un valiente en ese sentido y no me siento orgulloso por ello. La historia de Tony y Alex me ha devuelto a esa realidad y me ha recordado que no debe de ser fácil en absoluto enfrentarse a esa marginación y, a veces, a ese maltrato por parte de “compañeros” bastante cobardes e inmaduros. Sólo puedo decir que admiro a esos jóvenes que luchan en sus institutos y universidades por normalizar la visibilidad de la homosexualidad, a aquellos que tienen las agallas para vivir sin esconderse y enfrentar las consecuencias desagradables que una homofobia a extinguir aún les depara.

martes, 16 de noviembre de 2010

Daniel Radcliffe

Daniel Radcliffe saltó al estrellato como protagonista de la saga Harry Potter, cuya última película se estrenaba la semana pasada en Leicester Square, Londres. El joven actor cuenta con 21 años y algunas fotos muy sexies por internet. Con motivo de su reciente aparición en los medios, he decidido hacer una pequeña recopilación de sus mejores fotos.



Sin duda, estas fotos serán mucho más importantes para sus fans.

Más fotos sexies de Daniel Radcliffe.
Daniel Radcliffe en la Wikipedia.

domingo, 14 de noviembre de 2010

Bob en Mujeres Desesperadas. Capítulo 707.


Sé que he elogiado en numerosas ocasiones la serie norteamericana Mujeres Desesperadas de Marc Cherry y nunca lo haré bastante por una sola razón: no da una imagen distorsionada o estereotípica de la homosexualidad como el resto de series generalistas sí suelen hacer. El último ejemplo lo tuvimos con el episodio 7 de la nueva temporada, en el que sale a relucir que a Bob le gusta el baloncesto y la cerveza. Gabriel, enojada, se sorprende de que Bob no entienda de moda, etc. Bob es todo un ejemplo de lo que muchos gays, menos visibles que el resto, son y somos, ahí me incluyo. A veces, sin embargo, parece que en determinados ambientes se cuestiona tu propia homosexualidad por ser demasiado straight-acting. ¡Es el colmo! Como si no tuviéramos bastante con aguantar la homofobia, encima tenemos que demostrar que somos gays. Quizás para algunos un bolso y unos pantalones ajustados estarían bien. Claro, que así muchos heteros serían gays.

jueves, 11 de noviembre de 2010

Salir del armario


La salida del armario es probablemente uno de los momentos más importantes en la vida de un gay, especialmente si supone la culminación de un proceso de autoaceptación como fue mi caso. Algunos no entienden a qué viene esa necesidad de decirle a los demás que te gustan los tíos. Pues bien, esa necesidad viene en un doble sentido: sentirse cómodo con uno mismo y en sociedad. No creo que haya que mencionar el pequeño detalle de que mientras una persona no salga del armario todo el mundo presume, por defecto, que es heterosexual, a veces incluso cuando la persona es claramente afeminada, se finge la heterosexualidad por una especia rara de cortesía.


La función principal de la salida del armario, pues, es que la gente conocida sepa que no te gustan las mujeres y que, por tanto, dejen de hacer como si te gustaran, que era exactamente lo que hacían antes por ignorancia. Aparte de esto, es muy importante también para que el propio gay asuma de cara a los demás su orientación sexual y para llevar de un modo mucho más natural su sexualidad. Desde entonces, no habrá más miedo a ser descubierto ni más necesidad de esconderse, consiste digamos en ganar en libertad. La libertad que da mirar sin miedo a otros hombres, incluso hacer comentarios y, como no, llevar una vida sentimental tan satisfactoria como sea posible.


No obstante, a pesar de la simplicidad con la que se suele presentar la salida del armario, es un tema de gran complejidad. No la salida en sí, que es más una cuestión operativa: yo tardé tres semanas en ir encontrando a los distintos grupos de personas a las que se lo quería decir. Pero como en muchas cosas, el “antes” es fundamental y algunos hemos recorrido un camino enorme hasta aquí. Yo supe que era homosexual con diez años. No conocía esa palabra, no tenía ni idea de lo que era ser gay, pero me masturbé por primera vez pensando en un compañero de mi clase y, desde entonces, comencé a tener fantasías más y más recurrentes con él y luego con otros amigos y compañeros de clase. Al principio pensé que lo “normal” habría sido tener esas fantasías con chicas, pero no le di más importancia, no era consciente de las implicaciones que tenía y tampoco lo consideré algo reprobable salvo, claro, la masturbación en sí, especialmente conforme se fue acercando la primera comunión. El aspecto religioso tiene mucha importancia en mi caso porque vengo de una familia católica más bien tradicional, pero a esto volveré más adelante.


Conforme fueron pasando los años, uno va descubriéndose y las contradicciones entre los deseos propios y las expectativas y conductas de los demás van creando conflictos interiores. Estos conflictos no se resuelven definitivamente hasta que se sale del armario, pero no es algo que a uno se le ocurra. Ni se me pasaba por la cabeza esa posibilidad, probablemente tampoco conocía la expresión en la adolescencia. La única opción para mí era esconderme y seguir masturbándome como un mono, lo cual también ayuda a descubrirse. Cuando fui realmente consciente de cuales eran las implicaciones, lo único que se me ocurrió pensar es que mi primer sueldo al acabar la carrera iría para una terapia, de esas que “curan” la homosexualidad, como si fuera algo reversible. Daba por hecho que me casaría con una mujer y tendría hijos y una perfecta farsa hetero. La principal motivación de este tipo de sentimientos es esquivar la insoportable idea de defraudar a los padres. Durante esos años la religión fue un “refugio”, por no decir un armario. Todos los sentimientos de culpa que instiga especialmente el catolicismo hacen blanco fácil en un gay atormentado que no quiere defraudar a sus padres. Ese fue mi caso. Pero nada de esto: pensar que puedes cambiar, pensar que puedes llevar una “feliz vida hetero”, pensar que puedes incluso fingirlo no soluciona nada. Yo acabé teniendo novia (sí, una mujer, con vagina y berzas) con 19 años y no fue una experiencia completamente estéril: me sirvió para descubrir que eso era un cascarón vacío, que nunca iba a cambiar y que, antes o después, tendría que asumirlo y salir del armario. Aún así, hasta que ese hipotético día se configura, pueden pasar varios años. Aunque llegué al pensamiento “inevitabilidad de la salida del armario en un futuro hipotético”, aún necesité tiempo para mentalizarme, asumirlo y salir.


Si has vivido toda tu vida como un hetero, si toda tu vida has asumido unos varoles morales, una religión y unos principios que son incompatibles con quien eres, con quien vas a decir que eres, debes reevaluar todo lo que te han enseñado, todo lo que has asumido como bueno, todo lo que considerabas principios, valores, dios y empezar de nuevo. Cada cual tiene que recorrer esta catarsis a su manera. Es evidente que según la educación y el carácter de cada uno habrá gente que tenga menos problemas para asumir su homosexualidad y salir del armario, pero, en mi caso, esto supuso un auténtico cambio. Y no estoy hablando de un cambio estético, de convertirse en una locaza ni mucho menos. Yo me convertí en un deportista y comencé a leer mucha filosofía (Nietzsche es de gran ayuda si tienes que liberarte de la mala conciencia judeo-cristiana). Cuando salí del armario llevaba más de un año haciendo footing y gimnasia regularmente. Es muy importante tener la sensación de que asumes el control, tomar las riendas y marcarse objetivos. Yo me puse una fecha y decidí como iba a salir del armario. No es algo que aconseje hacer improvisadamente. Es importante mentalizarse, pensar a quién se le va a decir, cómo, en qué momento, por qué orden y en qué lugar porque todo ello puede ser importante.


Algunas enseñanzas que he extraído de mi experiencia personal son estas:

  1. Lo que determina realmente la reacción de una persona frente a tu salida del armario es su carácter, no tanto su religión o su ideología. Ha habido gente más conservadora que ha actuado con más naturalidad frente a la noticia durante y después.

  2. No pienses que tu padre es el “malo” porque es probable que no lo sea: si crees que las madres lo llevan mejor o que los padres siempre pierden los papeles a lo mejor te equivocas. En mi caso, mi padre lo llevó mejor. Pocas películas o series reflejan este hecho, pero la verdad es que muchos padres lo llevan mejor así que no te dejes guiar por los lugares comunes.

  3. Preguntas y argumentos para los que debes estar preparado:
  • ¿Estás seguro? Porque puedes estar confundido, a veces admiramos a un amigo o algo y pensamos que... Y mil variantes. Yo tuve que llegar a decir que veía porno gay y me gustaba la penetración anal para zanjar la polémica.

  • La discreción: al principio es probable que tus padres hagan mucho hincapié en la “discreción”. Sé comprensivo. Si a ti te ha llevado mucho tiempo aceptarte y salir del armario, los padres también tienen que “salir del armario” como padres de un gay e ir aceptando poco a poco que la gente lo sabe y lo va a ir sabiendo cada vez más.

  • A lo mejor eres bisexual: este argumento comodín es una variante sofisticada del ¿estás seguro? Si pareces hetero y nadie nunca ha sospechado nada, como era mi caso, es muy probable que te encuentres con este tipo de argumentos o preguntas. En el fondo, esto refleja una expresión más del mismo deseo: quiero que, al menos, lleves una vida hetero porque, si fueras bisexual, podrías estar con una mujer. Al final acabarán aceptando que eso no va a pasar porque las mujeres no te gustan.

  • ¿Qué hacer con los parientes? Esta pregunta es muy buena y, seguramente, no tiene respuesta unívoca. Considera todas las circunstancias. En mi caso, mi trato con mis parientes es lejano, los veo tres veces al año mientras que mis padres los ven varias veces al mes. En ese caso, quizás sea aconsejable que decidan ellos el grado de dispersión de la información entre la familia más lejana/susceptible. Si de verdad te afecta cotidianamente, haz un esfuerzo para que lo sepan sin crear un conflicto: da un tiempo para que tus padres lo vayan asumiendo. Al final tendrán que acabar enterándose igualmente.

  • ¿Y los hermanos pequeños? El mundo sería ideal si la homosexualidad de un hermano mayor no fuera vista como algo traumático por el entorno. Sin embargo, hasta cierta edad no hay una razón de peso para que los hermanos se enteren salvo, claro está, que haya algo que haga evidente que hay que decírselo (por ejemplo, el hermano mayor se casa... con otro hombre). Salvo estos casos, lo más aconsejable es no tensar la cuerda en casa, darle a los padres su espacio y que ellos decidan.

  • ¿Qué grado de difusión es el aconsejable? En esto hay para todos los gustos. Yo personalmente no entiendo que haya quien se lo diga a unas pocas personas como algo supersecreto si de lo que realmente se trata es de dejar de tener secretos, de dejar de esconderse. Yo, salvo el caso de los parientes más lejanos y susceptibles, y los hermanos pequeños, creo que lo mejor es que la información sea de dominio público. No hay nada más cómodo que invertir la presunción de heterosexualidad: dar por hecho que todo el mundo de tu entorno ya lo sabe, incluso los amigos de tus amigos en reuniones comunes y actuar con naturalidad. Sólo así es como verdaderamente te sientes liberado. En definitiva, se trata de poder llevar una vida cotidiana normalizada, en la que la propia homosexualidad no sea algo ocultable.


Si tienes interés en conocer mejor algunos detalles o en consultarme algo sobre mi experiencia personal, no tendré ningún problema en contestar bien vía comentarios o vía e-mail (alezeslogos@gmail.com).

martes, 9 de noviembre de 2010

Taylor Lautner

No me preguntéis por la saga Crepúsculo porque ni la he leído ni la he visto ni pienso hacerlo después de haber oído las críticas que he oído. Además, lo mío es más la literatura clásica. En cualquier caso, lo que sí sé es que uno de los protagonistas de las películas es Taylor Lautner, que ha sido un grato descubrimiento para mí. Después de ver la portada que tiene en Rolling Stone y algunas otras fotos más que he podido encontrar por internet... En fin, que es normal que se te caiga la baba.

El balón de rugby o, probablemente, de fútbol americano es un elemento clave. Toda relación entre masculinidad y deporte me parece sumamente erótica. Por no hablar de esos curtidos brazos que insinúan el vello de las axilas.

Creo que no hace falta comentar la manera en que se le marcan los abdominales.

La manera en la que la camisa blanca insinúa su cuerpo es sublime.

El pantalón de chandal, ¡puf!

¿A qué clase de juego nos está invitando?

Una mirada muy sexy.

Como ya nos conocemos, te dejo un enlace para ver más fotos sexies de Taylor Lautner.

domingo, 7 de noviembre de 2010

"Juste une question d'amour" (2000)

"Juste une question d'amour", "Just a question of love" o, como se podrá imaginar el público hispanohablante, "Sólo una cuestión de amor" es una película francesa estrenada en el 2000 y dirigida por Christian Faure que trata la historia de amor del joven Laurent y el científico Cedric. Laurent vive la homosexualidad dentro de su entorno familiar con miedo después de la trágica historia de su primo y, después de empezar una relación con Cedric, parece no encontrar el momento oportuno para normalizar la situación dentro de su casa. El joven, cada vez más abrumado y confuso, acabará viendo como su relación con Cedric se tensa sin que esto solucione ninguno de sus miedos. Ligeramente ayudado o, más bien, empujado por la madre de Cedric, Laurent deberá enfrentarse finalmente al desagradable conservadurismo de unos padres que también deberán lidiar con sus propios monstruos. Llena de realismo y no exenta de unos toques de sensualidad muy sugerentes, la película nos recuerda que no es fácil aún salir del armario para muchos jóvenes, especialmente en casa, lo que genera unas tensiones poco deseables y los aboca, en muchos casos, a unas dobles vidas indignas para la gente decente que nada tiene que ocultar. Sobre lo que atañe a la temática más específica de este blog, Laurent y Cedric hacen una pareja formidable: dos gays que transmiten una imagen no estereotipada de la homosexualidad sino, más bien, una imagen normalizada. La historia, lejos de ser un cuento de reinonas, es la vida sencilla de dos hombres que se quieren y que deben afrontar sus fantasmas y los de su familia para seguir adelante. Es tan sólo eso, una historia de amor.


jueves, 4 de noviembre de 2010

¡PARAD LA REACCIÓN CONSERVADORA EN ESPAÑA!


Una vez más, los conservadores suponen una amenaza a nuestros derechos civiles. Ahora es el Partido Popular en España quien quiere terminar con el matrimonio para las parejas del mismo sexo. ¿Qué clase de obsesión tienen con que podamos casarnos en igualdad de condiciones? No sabemos si al final acabará cumpliendo su amenaza o pasará lo que suele pasar con el PP en España, que juegan a reaccionarios, pero luego conservan las conquistas de derechos. Esta amenaza no es, en cualquier caso, moco de pavo habida cuenta de que siempre puede plantearse mantener nuestros derechos cambiando el nombre de la institución que regule la unión civil de parejas del mismo sexo. Es decir, es muy plausible que el PP cree una institución apartheid para los matrimonios homosexuales, algo así como lo que existe en muchos países europeos que mantienen una discriminación aberrante en materia del derecho al matrimonio. ¿Por qué hay que darle otro nombre a una institución que es igual? Si los gays vamos a tener los mismos derechos, incluso el de adopción, ¿qué manía es esa de llamarlo con distinto nombre?

Y es que muchos conservadores, en el fondo, lo que no soportan es que dos hombres o dos mujeres puedan amarse como lo hace una pareja heterosexual. Ellos siempre ven las relaciones homosexuales como una especie de degeneración en la que no hay amor tan sólo sexo, es decir, en su jerga puritana, “vicio y pecado” y, claro, ¿cómo puede tener el “vicio y el pecado” el mismo refrendo que la noble institución del matrimonio hetero, que busca la procreación, la formación de una familia biológica al estilo tradicional? Y es que muchos conservadores aún no se han dado cuenta ni de que el sexo por el sexo es “pecado” ni de que los gays también pueden amar ni de que el matrimonio no es ya la obsoleta institución que sólo existía para “perpetuar la supervivencia de la especie”. A lo mejor, el día que dejen de tener esa visión religiosa, obcecada y, en cualquier caso, peligrosa del matrimonio, dejarán que sean los cónyuges los que decidan lo que su matrimonio es y dejarán que la ley se limite a respetar la voluntad de los contrayentes.

Mientras tanto, mientras los conservadores sigan siendo una amenaza a mis derechos civiles y los de todo el colectivo LGTB, no puedo más que pedir ¡DETENED LA REACCIÓN CONSERVADORA! El PP no cabe en sí ante una eventual victoria en 2012, nosotros no podemos ponérselo fácil. Yo no soy socialista, no creo en un Estado fuerte, creo que el socialismo es un error, pero el PP no es menos socialista que el PSOE, ambos están de acuerdo en todos los pilares del Estado del bienestar y, sin embargo, el PSOE mantendrá mis derechos civiles y luchará contra la discriminación que nos amenaza mientras que el PP siempre nos verá como a algo incómodo, como unos desviados a los que hay que concederles derechos de segunda categoría. Es por eso por lo que hay que preparar una campaña ciudadana para el 2012. Todos aquellos amigos y familiares que os quieren y que os apoyan como gays deben saber lo que planea hacer con el matrimonio Mariano Rajoy y deben saber que un voto para el PP es un voto contra nuestros derechos.

Los planes de Mariano Rajoy contra el derecho al matrimonio de los gays y las lesbianas.

martes, 2 de noviembre de 2010

Charlie y Max Carver

Charlie

Charlie y Max Carver intrepretan a los gemelos del matrimonio Scavo en Mujeres Desesperadas. Cuentan con entre 21 y 22 años (nacieron en 1988) y están muy buenos. ¿A quién no le importaría montárselo con alguno de los dos o con los dos a la par?
Disfrutad el vídeo del making of the Mujeres Desesperadas.

domingo, 31 de octubre de 2010

Campaña de Sexe Jove de la Generalitat de Catalunya

Fotograma del corto

La reacción conservadora tuvo a bien atacar, una vez más, las campañas para el uso del preservativo, en este caso, la campaña promovida por la Generalitat Sexe Jove, en la que se incluye un vídeo orientado a la comunidad homosexual. ¿Qué vemos en ese vídeo, además de aprender que hay que usar condones? Pues, lo de siempre, el pobre muchacho gay tiene una infancia muy dura marcada por su preferencia a jugar con las muñecas frente a los juegos de niños (el baloncesto, los vaqueros). Sin embargo, como este blog nació para eso precisamente, he de decir que no todas las infancias de homosexuales han sido así, que también hay gays, como yo, que no hemos tenido la necesidad de jugar roles femeninos en la infancia, que hemos jugado al fútbol, al baloncesto, al balonmano, a los policías o que nos fascinaban los coches y el fuerte de playmovil. Y, sí, es muy probable que haya gays que se hayan sentido identificados con esa primera parte del vídeo, pero no son los únicos y debe quedar constancia de ello.

Ir a vídeo.

jueves, 28 de octubre de 2010

Una etimología de la palabra Gay

El icono más reconocible

La palabra gay en inglés antiguo significa alegre. Y es que parece que eso de etiquetar nuestra orientación sexual viene de largo. En este caso, la etiqueta es algo condescendiente, a menos que profundicemos un poco. Está bien estar alegre, pero ser alegre... Quizás la gente de vida alegre pueda permitírselo. Esta etimología puede conllevar una serie de connotaciones siempre relacionadas con el pecado, lo pecaminoso, lo irresponsable... La gente que es alegre, que toma decisiones alegremente, que alegremente folla con otros hombres y que es de vida alegre.

Pero, en fin, tampoco vamos a sacar las cosas de quicio por una palabra con la que en un principio no se nos quería tomar muy en serio. Porque en el fondo se trata de eso, de banalizarnos... Por otro lado, hay todo un catálogo de insultos que la civilización, en su “sabia” y ancestral homofobia, ha sabido depararnos: sopla-nucas (activo), come-almohadas (pasivo), maricón (Una Mari con una XXL), marica (diminutivo de Mari Carmen), sarasa (no tengo ni idea), come-pollas (demasiado explícito como para aclararlo). En fin, hay un sin fin de términos con los que dedicarle unas “elogiosas” palabras a cualquiera de nosotros. Tal vez, el término más neutro, también el de origen más científico sea homosexual. Es el término verdaderamente neutral, que no comporta cargas de valor o emocionales. Pero la cuestión es qué connotaciones tiene o sigue teniendo la palabra gay en la actualidad.

En cierto sentido debemos alegrarnos de que poco a poco esa palabra más inicua, que no del todo inocente, haya reemplazado los términos despectivos que, por otro lado, siguen usándose en el lenguaje coloquial para determinar actitudes poco varoniles (algún progre ha seguido reprochando esas actitudes empleando la palabra gay o derivados como gayer: ¡qué considerados!). Sin embargo, lo gay tiene una significación evidente en términos de lo que en marketing se conocería como asociaciones de valor. Moda, estilo, alta capacidad adquisitiva, diseño, decoración, arte, ópera... Prácticamente todas las asociaciones de valor ligadas a lo gay tienen relación directa con cuestiones tradicionalmente consideradas poco o nada masculinas y, en cualquier caso, poco aconsejables para el hombre preocupado por su reputación. Y no es que yo le quiera hacer el trabajo sucio al heterosexismo que aún subyace en nuestra cultura y en los movimientos contraculturales homosexuales, pero debemos ser conscientes de que las cosas no habrán cambiado del todo hasta que el lenguaje, que es la filosofía viva de un pueblo, no acabe con esas asociaciones de valor.

martes, 26 de octubre de 2010

Kurt en Glee

La pregunta que siempre se me pasa por la cabeza cuando veo una serie generalista con un personaje gay es ¿qué imagen transmite ese personaje sobre los gays? Y eso es precisamente lo que me pregunté con Glee. Es evidente que la introducción de personajes gays en series dirigidas a una audiencia mayoritariamente heterosexual es intrínsecamente un logro. Hace, al menos, visible un colectivo que siempre ha estado en la sombra del oprobio moral. Sin embargo, esto también puede tener sus consecuencias negativas, por ejemplo, puede transmitir una imagen simplificada y monolítica de la homosexualidad. Lo ideal sería, sin duda, que las series reflejaran la amplia realidad del colectivo gay sin convertirse en una serie de temática LGTB, pero esto parece demasiado pedir. Por otro lado, ¿por qué la mayoría de las veces los personajes gays son afeminados que responden al estereotipo clásico de gay? Es el caso de Kurt, pero no el único. Quizás la excepción sean las series que transmiten una imagen de gay menos convencional, entre ellas, Mujeres Desesperadas, que hace un enfoque muy interesante y sobre el que ahondaré en otra entrada.

domingo, 24 de octubre de 2010

Shelter (2007)


Shelter, dirigida por Jonah Markowitz es una de las mejores películas gays que pueden verse. Es probable que desde un punto de vista artístico haya películas de temática LGTB más logradas. Es evidente, pero lo que hace grande a Shelter es la aproximación que realiza al descubrimiento de la propia homosexualidad y su aceptación frente a la sociedad para poder seguir adelante con todas las responsabilidades. Lejos de dotar a todo este proceso del dramatismo propio de las Reinonas de películas de adolescentes que salen del armario, el protagonista de Shelter, Zach (Trevor Wright), es un personaje de una madurez y una altura impresionantes. Asombra su sencillez, su inocencia, su campechanía y al mismo tiempo abruman las responsabilidades que, tan joven, se ha echado encima. Detrás de la hermosa mirada de Zach y de ese imponente cuerpo perfecto de surfero hay un tío responsable y un padre de acogida que sabrá estar a la altura de las circunstancias. Joven, fuerte, masculino, entrañable, sexy, romántico, guapo, maduro, responsable... Ese es Zach y esa es la impagable imagen que de un homosexual traslada esta película. Tal vez esa sea la razón por la que Shelter es mi película LGTB favorita. Sin olvidar que le tengo un especial cariño porque fue la película que vi, por segunda vez, la noche antes de salir del armario.

Trailer:

jueves, 21 de octubre de 2010

"It gets better": una campaña norteamericana de apoyo a los gays adolescentes

Tras una terrible oleada de suicidios entre adolescentes gay norteamericanos, los sociedad de EEUU y de todo el mundo se ha movilizado para dar su mensaje de apoyo y esperanza a aquellos que aún tienen que lidiar con una homofobia aberrante en los institutos. El mensaje de Joel Burns, concejal en Fort Worth, Texas, EEUU, es esperanzador, pero al mismo tiempo nos recuerda que la vida de un gay nunca es fácil y que siempre nos toca lidiar con la incomprensión de los demás aunque, eso sí, vale la pena porque todo mejora. Y ese es el mensaje de la conmovedora intervención de Joel Burns: aguantad, luchad por una vida mejor: it gets better.

Trevor Project